Según un nuevo informe compartido por La Rioja, la provincia está logrando un crecimiento sostenido en innovación y tecnología, con el Polo Tecnológico afianzado como motor de empleo calificado, atracción de inversiones y retención de talento local. Un ejemplo de resiliencia y proyección en la economía del conocimiento.
Según datos de la Dirección General de Ingresos Provinciales (DGIP), relevados por la Secretaría de Ciencia y Tecnología, el sector muestra un crecimiento sostenido en los últimos años, desmarcándose de la caída que afecta a otras actividades.
Este avance no es casual: responde a una estrategia provincial de largo plazo que tuvo un punto de inflexión con la apertura del Polo Tecnológico de La Rioja, concebido como un espacio de articulación entre el sector público, las universidades, los centros de investigación y las empresas privadas. Allí se generan las condiciones para que compañías nacionales e internacionales encuentren un ecosistema fértil para invertir, innovar y contratar talento local.
Impacto real en empleo e inversiones
Un ejemplo destacado es el de T-Soft, empresa de soluciones tecnológicas que desembarcó en la provincia hace apenas tres años gracias al impulso del Polo Tecnológico. Hoy emplea a más de 100 riojanos y riojanas, demostrando que la provincia no solo forma perfiles calificados, sino que también logra retener talento y consolidar proyectos con fuerte arraigo territorial.
La experiencia de T-Soft refleja el impacto multiplicador de la economía del conocimiento: generación de empleo de calidad, diversificación productiva, exportaciones de alto valor agregado y una mayor autonomía económica para la provincia.
Una apuesta estratégica hacia el futuro
En un escenario global donde la innovación define las oportunidades de crecimiento, La Rioja se posiciona como un territorio competitivo, con capacidad de aportar soluciones tecnológicas de alcance internacional.
La consolidación de la economía del conocimiento en la provincia trasciende la coyuntura: es una apuesta estratégica de inclusión y desarrollo sostenible, que fortalece a las nuevas generaciones y coloca a La Rioja en un lugar central dentro del mapa tecnológico argentino.