Con el objetivo de agilizar el procedimiento y permitir que pequeños exportadores de servicios puedan brindarlos en el exterior más fácilmente, el Ministerio de Producción de la Nación unificó criterios con AFIP y el Banco Central para simplificar los trámites que se debían realizar.
A partir de ahora la exportación de servicios del conocimiento no requiere de una inscripción previa en el Registro de importadores/exportadores ni en el Registro de Exportadores de Servicios. Para poder realizar la actividad, en cumplimiento con el marco impositivo de la República Argentina, se deben cumplir sólo los siguientes requisitos:
- Solicitar el CUIT y clave fiscal en la dependencia de AFIP que corresponda según el domicilio fiscal declarado.
- Realizar el alta en el Monotributo o Régimen General (IVA, Ganancias y Autónomos).
- Emitir comprobantes electrónicos tipo “E”, de acuerdo con lo previsto por la RG 1415/03, y declarar las operaciones realizadas.
"Este es un paso más hacia el gran objetivo de este ministerio que es desburocratizar el Estado y simplificar la vida a los emprendedores y las PyMEs. Esta medida apunta directamente a formalizar el trabajo en modalidad Freelance y generar así más y mejores negocios", afirmó Carlos Pallotti, subsecretario de Servicios Tecnológicos y Productivos en Ministerio de Producción de la Nación, a través de un comunicado.
"Hoy muchas personas brindan servicios desde Argentina al mundo de manera individual: programadores, arquitectos, diseñadores, traductores, periodistas… Trabajan acá, y en la mayoría de los casos terminan cobrando por su trabajo en donde sea, porque para facturar y recibir el dinero en Argentina tenían que inscribirse en el Registro de Importadores y Exportadores en la Dirección General de Aduanas, sacar un seguro de caución y realizar un trámite en el Registro Nacional de Reincidencia. Un trámite de días", explicó Carlos Pallotti en contacto con Argencon.
"Era tal el control que al final nadie lo hacía, y utilizaban una cuenta bancaria en el exterior, y luego veían cómo traían el dinero. Ahora, pudimos resolver con la AFIP el hecho de que no haga falta el registro como exportador, porque esto fue pensado para la exportación de bienes, no de servicios. Son exportaciones que no pasan por la aduana. Entonces los exportadores directamente pueden emitir una factura E por la exportación, declarando la operación en el balance de la compañía, sin otros trámites", agregó el funcionario.
El tercer rubro de exportación argentina, luego de las oleaginosas y de la industria automotriz, lo constituyen los servicios basados en conocimiento, representando aproximadamente el 7,2% del total de exportaciones anuales.