El Municipio de Tandil, la Universidad Nacional del Centro (UNICEN) y el Cluster Tecnológico Tandil pusieron en marcha el Primer Censo de la Economía del Conocimiento, una iniciativa enfocada en obtener datos certeros para visibilizar y fortalecer un sector clave. Como Argencon celebramos este paso que se alinea con nuestros objetivos de generar condiciones que favorezcan el desarrollo del sector y la formación de talento digital.
La necesidad de la información
El valor central de este censo radica en la certeza que aporta a la toma de decisiones. Esteban Sarabia, presidente del Cluster Tecnológico Tandil, enfatizó en diálogo con Radio Tandil que los datos obtenidos serán vitales para el desarrollo futuro de la ciudad. Sarabia utilizó una analogía clara para describir la importancia de esta información: «Es volar sin instrumentos versus poner un avión y tener todo el instrumento para hacerlo. Sin información es muy difícil pilotear».
La necesidad de esta medición integral surgió de la limitación de la información interna de la Cluster, que detectó que si se limitaban a preguntar a sus propios asociados se estarían «pescando en una pecera». Para obtener una visión integral del ecosistema productivo, se solicitó la colaboración del área de Estadísticas del Municipio y del equipo de la Universidad. El objetivo es entender qué está sucediendo en el ámbito de la EdC, más allá de los asociados del Cluster.
Un ecosistema diverso y en constante mutación
Tandil se posiciona como un «laboratorio a cielo abierto» que cuenta con una matriz productiva diversificada y mucho talento en la Economía del Conocimiento, lo cual debe tomarse como una «gran oportunidad». La ciudad ya alberga más de 70 empresas de software o servicios informáticos.
El ecosistema de la Economía del Conocimiento en Tandil ha mutado significativamente desde su inicio, hace 17 años, cuando la entidad nació dentro de la Industria del Software. Hoy, el concepto abarca mucho más que solo la programación:
- Se ha diversificado muchísimo, incluso antes de la masividad de de Inteligencia Artificial (IA).
- Actualmente incluye Biotecnología y Nanotecnología, con varias empresas y proyectos activos en la ciudad, además de la producción audiovisual.
La definición adoptada para este sector clave es amplia: la Economía del Conocimiento es «todo aquello que puede hacer una persona con determinado talento, lo que puede entregar como producto o servicio, de manera local o a distancia, utilizando como insumo su propio conocimiento». Esto incluye a mucha gente que trabaja en empresas que quizás no tienen que ver directamente con la EdC, pero cuyo trabajo sí lo es.
Fortalecimiento productivo y vuelo guiado
El objetivo principal de este censo es fortalecer el entramado productivo de la ciudad y visibilizar a todos aquellos que contribuyen al sector.
La información recabada, que será de acceso público (respetando la ley de protección de datos personales), permitirá tener una «radiografía mucho más certera» de lo que sucede en Tandil. Pero lo más importante es que ayudará a identificar «lo que no tenemos» (falencias o carencias).
Esta detección de falencias habilita la acción estratégica. Si los sectores privado, público o académico identifican una carencia (por ejemplo, un cierto tipo de certificación necesaria para determinados negocios), pueden actuar con esa información. Esto puede activar nuevos emprendimientos o generar políticas específicas.
Para Argencon, que trabaja promoviendo el desarrollo de la EdC a nivel nacional, la iniciativa de Tandil es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre el clúster, la academia y el gobierno local, puede asegurar un «vuelo guiado» para que el crecimiento de la ciudad se gestione con certeza.
Este esfuerzo de medición es crucial para que ecosistemas productivos como el de Tandil, con su vasta historia y diversidad (desde la ganadería y la minería hasta el turismo y la metalmecánica), continúen su evolución y consolidación como centros de innovación.